Harrison Butker, de los Kansas City Chiefs, es uno de los mejores pateadores de la NFL. Eso es suficiente para que sea famoso en el mundo del fútbol americano, pero los jugadores de su posición no suelen ser conocidos por los observadores más ocasionales, a menos que hagan algo especialmente genial o terrible en el campo.
El pasado fin de semana, con la NFL en plena temporada baja, Butker se encontró en el centro de un gran número de fuertes críticas en las redes sociales, y no tenía nada que ver con su trabajo.
El sábado, Butker pronunció un discurso de 20 minutos ante los graduados del Benedictine College, una escuela católica conservadora de Atchison, Kansas, a unos 80 kilómetros al noroeste de Kansas City. Llenó su intervención con un discurso político conservador, despotricando contra “los valores culturales y los medios de comunicación degenerativos”. Reprendió al presidente Joe Biden por su postura como católico que apoya el derecho al aborto, e instó a las mujeres a renunciar a sus carreras para poder mantener a sus maridos.
“Puedo decirles que mi bella esposa, Isabelle, sería la primera en afirmar que su vida comenzó verdaderamente cuando empezó a vivir su vocación como esposa y como madre”, dijo Butker. “Hoy estoy en este escenario y soy capaz de ser el hombre que soy porque tengo una esposa que se entrega a su vocación”.
Y añadió: “No puedo subrayarlo lo suficiente: todo mi éxito ha sido posible porque una chica que conocí en la clase de banda en la escuela secundaria se convertiría a la fe, llegaría a ser mi esposa y abrazaría uno de los títulos más importantes de todos: ama de casa”.
Butker, que parecía no poder hablar más, recibió una ronda de aplausos que duró casi 20 segundos antes de que pudiera continuar. Al final de su discurso, el público le dedicó una gran ovación.
La reacción en internet, sin embargo, no fue tan receptiva, y sus comentarios fueron criticados en publicaciones de TikTok, Instagram y X.
Los responsables del equipo no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios, pero las opiniones expresadas por Butker llevaron a la NFL a emitir un comunicado en el que se afirmaba que el discurso no se ajustaba a los valores de la liga, y provocaron que un equipo rival, Los Angeles Chargers, troleara a Butker en las redes sociales. Hasta el jueves por la tarde, más de 125.000 personas habían firmado una petición en Change.org para que Kansas City cortara lazos con su pateador estrella.
Butker, de 28 años, quien se describe a sí mismo como un católico devoto, ha ganado tres Super Bowls con Kansas City desde que se unió al equipo como novato en 2017. Convirtió sus 11 intentos de gol de campo en la carrera más reciente del equipo en las eliminatorias, y estableció un récord para el gol de campo más largo en la historia del Super Bowl (más de 57 metros) en la victoria del equipo en el campeonato sobre los 49ers de San Francisco en febrero.
Pero en un equipo lleno de estrellas —Patrick Mahomes está ampliamente considerado como el mejor mariscal de campo de la NFL, y el ala cerrada del equipo, Travis Kelce, está entre los mejores que han jugado en su posición y está saliendo con Taylor Swift— Butker nunca había destacado realmente. Su discurso del sábado puede haber cambiado todo eso.
En el discurso, Butker animó a los hombres a “no pedir disculpas por su masculinidad”, se refirió a “los pecados capitales” de la homosexualidad y criticó a los sacerdotes católicos por derivar “su felicidad de la adulación que reciben de sus feligreses”. En su intento de demostrar su punto de vista, Butker mencionó la letra de la canción “Bejeweled” de Swift, sin mencionarla a ella ni a Kelce por su nombre.
“Este exceso de familiaridad resultará siempre problemática”, dijo Butker, “porque, como dice la novia de mi compañero de equipo, ‘la familiaridad engendra desprecio’”.
Citar las letras de Swift en un discurso de este tipo era inusual, teniendo en cuenta que la cantante es una magnate del entretenimiento, quien habla con frecuencia de empoderar a las mujeres y se cree que tiene un patrimonio neto de más de 1000 millones de dólares.
Butker también se había referido a Swift a principios de año, en una entrevista con la cadena de televisión Eternal Word, describiéndola como “tan humilde y tan amable”. Añadió, en un guiño a los valores de los que habló en el discurso del sábado, que esperaba que ella y Kelce “se casaran y formaran una familia”.
Las opiniones expresadas durante el discurso de graduación de Butker en Benedictine suscitaron una rápida condena. Justice Horn, antiguo comisionado de Kansas City, escribió: “Harrison Butker no representa a Kansas City ni lo ha hecho nunca. Kansas City siempre ha sido un lugar que acoge, afirma y abraza a los miembros de nuestra comunidad LGBTQ+”.
